Los valores que registraban las mayores subidas del Ibex 35 tras la apertura de la sesión eran Banco Sabadell, con un alza del 2,54%, por delante de Repsol, con una subida del 2,32%, y de Acerinox, con un avance del 1,39%. En el extremo opuesto del selectivo se situaban IAG, con un retroceso del 1,37%, PharmaMar, con una caída del 1,09%, y Solaría, que perdía un 0,73%.

Entre los representantes de la banca en el índice, los títulos de Caixabank ganaban un 0,99% tras la apertura, mientras que Santander y BBVA subían un 0,38% y un 0,11%, respectivamente, y Bankinter se anotaba un alza del 0,81%.

Al margen del Ibex 35, el resto de los principales índices bursátiles del Viejo Continente también cotizaban en positivo al comienzo de la jornada. De este modo, el Ftse100 de Londres subía un 0,55% y el Dax de Fráncfort un 0,66%, mientras que el Cac 40 de París avanzaba un 0,42%.

Hoy vamos a conocer las actas de la última reunión de política monetaria del Banco Central Europeo del 10 de junio en la que confirmó que en el tercer trimestre va a comprar más deuda que en el primero.

Se publican un día después de que el BCE revisase su estrategia y abandonara el objetivo de mantener la inflación “cerca, pero por debajo del 2%” y ahora buscará llevar la inflación al objetivo del 2% a medio plazo.

En el mercado continuo sube Oryzon Genomics (+3%) que va a presentar datos de seguridad y eficacia de su fármaco vafidemstat del ensayo de Fase II ESCAPE en enfermos de CoVID-19 en el congreso ECCMID-2021. La empresa señala que vafidemstat fue seguro y bien tolerado en pacientes graves de CoVID-19 y se han confirmado sus efectos antiinflamatorios.

Avances para las automovilísticas europeas que se recuperan de lo descensos de ayer y a pesar de que se han conocido datos de ventas de coches en China de junio que han caído más un 12,4%.

En el mercado, muy pendientes de la cotización de Berkeley porque hoy el Consejo de Seguridad Nuclear se pronuncia este viernes sobre el proyecto de la mina de uranio a cielo abierto en Retortillo, en Salamanca. Una vez recibida la valoración del CSN, la decisión final está en manos del Ministerio para la Transición Ecológica. En la sesión de ayer, el volumen de negocio se disparó y sus títulos subieron un 17%.

La bolsa de Asia cae a mínimos de dos meses ante el avance de covid-19 delta

Las bolsas asiáticas caían el viernes a mínimos de dos meses. El índice MSCI de acciones de Asia-Pacífico —que excluye a Japón— llegó a caer hasta 665,19, un nivel que no se veía desde mediados de mayo. El selectivo redujo algunas de esas pérdidas para bajar posteriormente un 0,3% a 672,29. En lo que va de semana, el índice ha perdido un 2,6%, lo que supone el mayor descenso desde mediados de mayo.

El Nikkei japonés cayó un 0,6%. Las acciones chinas también se debilitaron, y el índice CSI300 perdía un 0,3%. Las acciones australianas bajaban un 1,2%, con las medidas de confinamiento en Sídney, la ciudad más poblada del país, reforzadas para detener la propagación de la variante delta del covid-19. Los analistas afirman que una acumulación de acontecimientos es lo que ha desencadenado el giro en el sentimiento, más que un único catalizador.

Las tensiones políticas en Oriente Próximo, Rusia y China han contribuido a aumentar la preocupación de los inversores, mientras que las medidas de Pekín contra las empresas chinas que cotizan en bolsa también han pasado factura. Como resultado, los mercados están empezando a cuestionar uno de los negocios más exitosos de este año, lo que se conoce como la narrativa de la reflación, es decir, la apuesta por que los activos que salen beneficiados con el fortalecimiento de la economía y con una mayor inflación superarán a los más seguros y estables.

En las últimas operaciones de la sesión asiática, los rendimientos del papel a 10 años habían rebotado hasta el 1,329%, aunque todavía no se acercan a los máximos de 2021, del 1,776%, alcanzados en marzo. Por otra parte, el número de solicitudes de ayudas al desempleo presentadas por los estadounidenses, que se publicó el jueves, refuerza la idea de que la recuperación del mercado de trabajo tras la pandemia del COVID-19 sigue siendo muy difícil. En cuanto a las divisas, los dólares australiano y neozelandés, sensibles al riesgo, se encontraban bajo presión, con un descenso del 0,1% cada uno. El yen, considerado como un valor refugio, se acercaba a máximos de un mes en 110,01 por dólar. El euro bajaba a 1,1834 dólares.